El mañana empieza hoy

¿Cómo? No, no como siempre. Hablar de renacer como un fénix sería pretencioso y cliché; más bien, prefiero pensar en un sapo que decidió mudarse de un pantano a un lago... Aún corre el riesgo de enlodarse. Como regalo de la Luna a quien se atreve a romper las paredes de su habitación, en medio del lago aguardaba paciente una hermosa rosa de Venus de color paz con pétalos frescos y afables; quizá había estado ahí desde siempre, quizá no había llegado su momento, ¿Tiempo perdido? No, convicciones reforzadas e inmadurez marchita.
Le fue difícil reconocer las bondades de su nuevo hogar, le fue difícil no anhelar los placeres de su antiguo hogar, pero ahora tenía un por qué y no sólo el qué, ahora estaba donde quería y no donde podía.
Desde entonces, cada noche se refugia el sapo en su preciada flor, no escapando sino respirando. Recordando para aprender, no para extrañar... Viviendo para vivir y no al revés.

No comments: